Reseña: HERIDAS ABIERTAS

Cuando supe que otro libro de Gillian Flynn estaba a la venta en español me lo compré sin dudar. Después de leer "Perdida" y quedarme prendada de la forma de escribir de la autora me importaba poco de qué tratara la novela. De hecho, la primera vez que he leído su sinopsis ha sido ahora, mientras la cogía de internet para añadirla a la ficha. 

Me decepcionó un poco que fuera tan finito, porque cuando sé que algo va a gustarme prefiero que tenga cuantas más páginas mejor, pero la verdad es que tiene el grosor que la historia necesita.

A pesar de ser un thriller de misterio que gira en torno al asesinato de dos niñas en un pueblecito de Missouri, lo que menos destaca en este libro es precisamente eso, el misterio. No miento si digo que en ningún momento he deseado saber realmente quién había asesinado a las niñas. La investigación es lenta y, a mí personalmente, no me parece ni importante ni intrigante ni nada parecido, solo es una excusa para presentarnos al personaje de Camille en el entorno opresivo de su pueblo natal. Para mi gusto, esta historia no va de los asesinatos de dos niñas y de cómo una reportera se involucra en la investigación. Esta historia trata de todo aquello que yace debajo de las apariencias, de todo lo que no se ve, de lo que se intuye pero no se dice, de lo que sabemos pero no queremos saber. Si tuviera que definirla con una imagen sería la de una preciosa manzana roja, brillante y perfecta, que está completamente podrida por dentro.

No me malinterpretéis, "Heridas abiertas" me ha parecido una muy buena novela. Nunca me había tomado con una protagonista como Camille, una antiheroína de tomo y lomo con tantos tonos de gris a que no podremos más que entender y compadecer por mucho que no nos guste cómo actúa o cómo piensa. Camille no debe gustarte, no está ahí para caerte bien, está para contarte su historia, para levantar muchas ampollas de su pasado que nos pondrán la piel de gallina, porque si algo tiene esta novela es un halo de "mal rollo" que se va acrecentando a medida que leemos. 

He experimentado muchísimas emociones con sus personajes: pena, asco, confusión... perplejidad. Es increíble cómo la autora nos presenta una realidad y luego va desollándola capa por capa hasta mostrarnos toda la porquería que hay debajo. En otra entrada ya dije todo lo que pensaba de lo que me parece Gillian Flynn (que, resumiendo, viene a ser algo así como que LA ADORO) y después de terminar este libro sigo pensando lo mismo. Es la autora del detalle, de lo que no se ve, de lo escabroso, de las falsas apariencias y, ¿por qué no decirlo? de personajes tan machacados psicológicamente que acaban como putas cabras. Unas cabras de las que da gusto leer, eso sí.

Por otro lado, la edición deja bastante que desear. No me he encontrado erratas, pero las páginas son finísimas y las pastas muy blandas. Libro-chicle, como yo lo llamo, que te pongas en la postura que te pongas para leer le vas dejando marcas por todas partes.

A parte de eso, "Heridas abiertas" es una novela que recomiendo a todo el mundo, magistralmente escrita, con un buen final pero con una trama de misterio que no llega a interesar demasiado, pasando a un segundo plano para dar cabida a la importancia de sus tétricos y únicos personajes.

Puntuación